lunes, 19 de noviembre de 2007

"Miérdra con la Patafísica"

La patafísica es un movimiento cultural francés proveniente del surrealismo. Fue inventado por Alfred Jarry a principios del siglo XX con su novela Gestos y opiniones del Dr. Faustroll, patafísico. La patafísica, proclamada como ciencia de las soluciones imaginarias, se basa en el principio de la no exclusión de los opuestos y se vuelve el medio de descripción de un universo complementario, constituido de excepciones. En este universo, todo es anormalidad. La regla de la patafísica es la excepción de la excepción: es lo extraordinario que explica y justifica la presencia de la anormalidad. La patafísica es el gran giro, la superación de la metafísica, la vuelta más allá o más acá, la ciencia de lo que se sobreañade a la metafísica, sea en sí misma, sea fuera de ella, extendiéndose tanto más lejos de ésta como ésta de la física. Es la consideración de las leyes generales de la física, como un conjunto de excepciones no tan excepcionales. Solo la excepción es lo que hace avanzar a la ciencia. Con el propósito de difundir la patafísica se fundó el Collège de Pataphysique en 1948.

La obra Ubú rey de Alfred Jarry se estrena el 10 de diciembre de 1896 y a partir de ese día el teatro sufre una gran transformación, se rompe con la fuerte tradición del realismo al renovar tanto la escritura dramática como los conceptos de puesta en escena, la iluminación, vestuarios, utilización de máscaras y gestualidad actoral. La primera palabra del personaje sobre el escenario es ¡Mierdra!, un grito que rompe con las características de los personajes de las obras realistas y, a su vez, con el realismo mismo. Ridiculiza, en cierto modo, Macbeth a la vez que retrata a una burguesía europea que no para de crecer y expandirse por el mundo. El lenguaje patafísico de UBU que es sobre todo un lenguaje destructor, no pretende representar la realidad sino sustituirla. Las malas palabras disfrazadas como “Mierdra” fluyen por los diálogos de la obra, mostrando lo innoble y grotesco de Ubú rey y haciendo difícil la diferenciación entre donde termina el lenguaje de mentira y donde comienza el de verdad. Por ejemplo, dice Padre Ubú: “Mierdra, para empezar no se pagará más a los magistrados; tendréis las multas que pronunciéis y los bienes de los condenados a muerte”.

Esta obra, puede ser considerada una extraordinaria sátira contra el ejercicio abusivo del poder. Ubú es un rey grotesco, símbolo de la codicia, la ignorancia y la arbitrariedad. Jarry inventa, a la par que a este singular personaje, la palabra Patafísica, o sea la ciencia de las soluciones imaginarias.

Eugène Ionesco fue nombrado Sátrapa honorífico del Collège de Pataphysique, por su capacidad para tergiversar la realidad; su inteligencia se muestra en cada una de sus obras de teatro, las cuales fueron muy comentadas y criticadas.

El rey se muere de Eugène Ionesco, se contempla como la obra más importante escrita sobre el propio morir. En esta obra, el espectador tiene una gran oportunidad de asociar o no los hechos con la realidad. El universo planteado en esta obra es impredecible y a lo largo de él se puede observar un sentido del humor pesimista sobre la vida del rey y de todos los personajes: la existencia de un rey sin reino o la existencia de un rey que es insignificante para su reino hasta cierto punto resulta ridícula o absurda.

A lo largo de la obra, el rey cuestiona la existencia de los otros personajes y la suya misma, no cree que su muerte fuera a suceder, cree que solo él podía dictaminar su muerte, cree tener poder sobre el universo en el que vive y sobre cada una de las cosas que lo componen.

El final parece ser conocido durante toda la obra por los personajes y hasta cierto punto por el público, pero la divagación entre los cortesanos para lograr que el rey comprendiera que la muerte no estaba en sus manos es tan larga que en cierto punto los diálogos comienzan a perder sentido, se hacen más vagos, la comunicación entre deja de suceder y hasta parece imposible.


1 comentario:

Verónica Pena dijo...

Felicidades por el relanzamiento del blog a partir de este artículo.
Muchas gracias, Ivana.